Cada vez son más los usuarios que utilizan las vías digitales para realizar operaciones bancarias, de la mano de una mayor confianza en los canales web y, por qué no, para evitar las demoras típicas en las sucursales bancarias.
 

Según datos difundidos por el Banco Central de la República Argentina (BCRA), el número de transferencias bancarias entre individuos creció un 47% en el primer trimestre del año, respecto de igual período del año anterior.
 

Así, la cantidad de operaciones entre particulares prácticamente igualó a la cantidad de transacciones entre empresas en el mismo período, contabilizando entre ambas más de 21,6 millones entre enero y marzo de 2015.
 

Esta evolución viene de la mano de una tendencia que se está viviendo a nivel mundial, donde, según un estudio elaborado por The Economist Intelligence Unit, patrocinado por SAP, el 57% de los consumidores destacaron tener confianza en operar con su banco por medio de las plataformas online.
 

Según el estudio, hoy, el promedio mundial de operaciones realizadas por canales electrónicos es de 36% (27% en América latina), una realidad que tenderá a crecer en los próximos años: para 2019 se espera que el 48% de las operaciones bancarias latinoamericanas se realice de forma online, de las cuales un 56% se espera que sean desde un dispositivo móvil.
 

Los bancos deben utilizar la innovación para responder a las exigencias del mercado, tanto en materia regulatoria como respecto de la demanda de los nuevos consumidores. Los datos son muy prometedores para el país”, afirma Martín Saludas, director de Ventas de SAP Argentina.
 

Según sus datos, las aplicaciones de los bancos argentinos para dispositivos móviles ya registran más de 1,25 millón de descargas, solo para sistema operativo Android, lo que demuestre el interés de los consumidores. Para el estudio, el 77% de los usuarios accede a la banca móvil porque les permite operar con su entidad cuando quieren, sin restricciones de tiempo. 
 

También, se destaca que los bancos en la Argentina enfrentan tres tendencias: la incorporación de la generación Y al mercado, donde un 65% de ellos espera productos personalizados y soporte del banco para administrar y gastar su dinero; la masificación de los servicios digitales, con adopción masiva de smartphones y tabletas y el impulso de las redes de 4G; y la globalización y nuevos competidores, con el desafío de la adopción local de normas internacionales, como IFRS o NIIF, para el reporte global de resultados financieros.
 

Fuente: iprofesional.com