Tras meses de negociaciones, los consejos de administración de Servired, 4B y Euro 6000 han aprobado su fusión en una única marca. La operación comportará un recorte del 35% de la plantilla de las tres empresas fuisionadas a través de fórmulas como prejubilaciones para suavizar el impacto social, según han indicado fuentes próximas a la negociación.
 

Plazos de la operación
 

A la espera de la ratificación de las autoridades reguladoras, se prevé que la nueva sociedad empiece su andadura a partir del primer trimestre del 2017 y que se convierta en uno de los principales sistemas de pago de Europa. Sin embargo, no estará plenamente operativa hasta el tercer trimestre debido a la necesidad de sacar de la sociedad algunos activos de las entidades bancarias afectadas que quedarán fuera del perímetro incluido en la operación de fusión. 
 

A partir de ahora será el turno de la Comisión Nacional de Mercados y de la Competencia, el Banco de España y el Ministerio de Economía, que deben dar el visto bueno a la integración, aunque se pronostica una respuesta favorable, puesto que el supervisor bancario se ha decantado desde siempre por un único medio de pagos.
 

De hecho, España es uno de los pocos países en los que todavía existen varias redes de cajeros y de tarjetas ya que en la mayoría de Estados ya se ha llevado a cabo un proceso de unificación para optimizar los costes de la banca y mejorar la innovación de los sistemas de pago de cara al futuro. En España, ese proceso de unificación ya se ha producido en el sistema utilizado por las entidades bancarias para que los usuarios ordenen y reciban transferencias de fondos.
 

La composición de la nueva sociedad
 

La estructura accionarial de la nueva marca se repartirá con una participación del 66% de Servired, que cuenta con BBVA, CaixaBank, Bankia y Sabadell como principales accionistas, el 20% para 4B, formada por Santander, Popular y Banca March, y el 14% para Euro 6000, con Unicaja, Ibercaja, Kutxabank, BMN, Liberbank, Evo Banco y Abanca.
 

La marca contará con 63.900 cajeros automáticos, siendo Servired la que aporte un número mayor, con 33.100 cajeros. Por su parte, Euro 6000 lo haría con 18.098 terminales y 4B con 12.752.
 

El nuevo sistema de pago tendrá 71,8 millones de tarjetas, tanto de crédito como de débito. Servired suma 42 millones, puesto que es la que más socios tiene, 4B da 20 millones y Euro 6000 ofrece 9,77 millones.
 

Nuevo contexto
 

La unificación de las redes de cajeros y de tarjetas se produce después de un primer intento fallido de fusión entre las dos principales operadoras del sector, Servired y 4B, llevado a cabo hace ocho años. Sin embargo, los cambios que se están produciendo en la banca con la aparición de nuevos sistemas de pago de la mano de compañías tecnológicas que amenazan a las entidades financieras han impulsado esta vez la unificación con el visto bueno del sector financiero y de las entidades reguladoras. Además, cuenta con el precedente de Bizum, la nueva plataforma de pagos a través del teléfono móvil en la que participan la mayoría de los bancos españoles. 
 

Otro de los factores que han favorecido que haya fructificado la operación de fusión entre Servired, 4B y Euro 6.000 es la reducción de las comisiones que cobraban los bancos a sus clientes por la utilización de cajeros de otras redes, que ha hecho "que no tenga mucho sentido mantener sistemas diferentes".
 

La hoja de ruta que se marcará la nueva sociedad que controlará los cajeros y las tarjetas de crédito incluye también impulsar el uso del dinero de plástico, que en España tiene todavía potencial por delante, así como la compatibilidad de los sistemas entre entidades financieras y la incorporación de nuevas formas de pago basadas en los perfiles de usuarios. Además, simplificará los sistemas de venta en los comercios, que podrán disponer de un solo terminal para el cobro a sus clientes.
 

Fuente: elperiodico.com