El interés máximo que puede cobrar en Colombia una entidad crediticia es de 29,78% para el cuarto trimestre, lo que supone una caída de 0,73% respecto al indicador que había establecido un trimestre anterior.
 

El hecho de que la tasa de usura fije un ‘tope’ al interés que pueden cobrar los bancos en sus créditos de consumo y comercial, hace que las entidades tengan que bajar las cuotas. Sin embargo, este efecto no tendrá el mismo impacto en todos bancos, pues hay entidades con tarifas de 25% y otras con más de 30,04%. Según las cifras hay cinco bancos que actualmente cobran a sus clientes una tasa superior al nuevo límite, lo que automáticamente hace que sea en estos en los que se verá un mayor cambio. 
 

Tal como afirmó Santiago Perdomo, presidente de Colpatria, las mayores reducciones se verán en los bancos pegados a la usura. “Los clientes que verán un mayor alivio serán aquellos cuyo banco esté más pegado a la tasa de usura, mientras que los que ofrecen tasas más atractivas, el impacto serán menor”. 
 

Al mirar cuáles son los bancos que tendrán que hacer los mayores ajustes se tiene que coinciden con los mayores colocadores de plásticos. Este es el caso de Davivienda, que hasta ahora tenía una tasa de 30,45% y 1.654.698 plásticos, Colpatria, que cobraba 30,25% y cuenta con 1.977.883 tarjetas o Bancolombia, que para mantenerse alejado de la usura también tendrá que reducir su interés de 29,14% para las 1.496.408 tarjetas. 
 

Por otro lado, hay ciertas entidades, como Banco Pichincha o Banco Agrario, con tasas de 23,39% y 24,97% se encuentran alejados de la tasa máxima, por lo que el alivio será menor. La tasa de usura no había estado tan baja desde el cuarto trimestre de 2011 cuando estaba en 29,09%. 
 

El hecho de que haya bajado la tasa es una tendencia del sector, que se explica por la competencia entre las entidades. De acuerdo con Luis Carlos Sarmiento Angulo, presidente de la junta directiva de Grupo Aval, “cada vez son más los bancos que deciden separarse de la tasa de usura, por lo que su movimiento cada vez será menos relevante”. 
 

Cómo se verá beneficiado el bolsillo de los deudores, tal como explicó Munir Jalil, economista jefe de Citibank, se podrán beneficiar tanto en los nuevos créditos como los antiguos. “Es claro que la menor tasa tendrá impacto directo en los nuevos créditos que se tomen a partir de hoy, pero hay que tener en cuenta que los que se hayan tomado anteriormente por encima de la tasa actual, también se cambiarán”. 
 

Además de reducir tasas, una de las grandes ventajas es que los bancos comenzarán otra vez a ofrecer compras de cartera. Un cliente decide vender su cartera cuando sabe que en el mercado hay otro banco que le ofrece una tasa más baja algo que beneficia al consumidor, pues reduce su deuda, y al tiempo, genera una mayor competitividad entre las entidades. 
 

La competencia es una de las razones que han impulsado la caída en la tasas de interés que finalmente se ha reflejado en el recorte en la usura. Según Daniel Castellanos, vicepresidente de Asobancaria, la tasa de usura refleja que en los últimos meses se ha podido ver una reducción en los intereses de colocación. Con esto, la consecuencia final será un mayor consumo y endeudamiento para el último trimestre del año. Así lo afirmó Castellanos, quien dejó claro que una reducción en el interés, genera un incremento en las deudas de las familias. “Lo que se puede esperar es una temporada de expansión del crédito, lo que también va a tener un impacto positivo en el consumo de las personas del país”. 
 

Al tener que reducir las tasas, los perjudicados serán los bancos ya que eso supondrá un menor ingreso gracias a su operación. Esto, según Jalil, hace que se tenga que repensar las estrategias para no afectar los resultados financieros. Así, aunque los consumidores tendrán menos tasas al contratar sus créditos, se recomienda no sobreendeudarse. 
 

Indicador por encima de lo esperado 
 

La certificación de la tasa de usura por parte de la Superintendencia Financiera de Colombia, fue una sorpresa para el mercado que había estimado una cifra por encima de 30%. En este sentido, la razón que podría explicar la mayor variación son los cambios en la tesorería. 
 

Tal como explicó Munir Jalil, “la tasa de usura se calcula con la combinación de las tasas en tarjetas de créditos, crédito de consumo y de tesorería. Por eso, al no ver reducciones tan significativas en cuanto a los dos primeros, se podría pensar que con la crisis de los TES, fue el crédito de tesorería el que generó la caída”.
 

Fuente: COLPRENSA