“Te hago un Bizum” o “¿Me pagas con Bizum?” son frases cada vez más habituales tras una cena entre amigos o al hacer un regalo colectivo en España. Es que Bizum nació en octubre de 2016 y tuvo una expansión meteórica: en apenas 15 meses ya tenía 1 millón de usuarios, y actualmente supera los 7 millones.
“¿El secreto? Nuestros usuarios son nuestros mayores prescriptores, son auténticos altavoces para la extensión del servicio”, desvela a PaymentMedia Ángel Nigorra, director general de Bizum.
Se trata de un servicio de pago instantáneo de cuenta a cuenta a través del teléfono móvil, que permite realizar pagos entre particulares y en comercios online de forma sencilla, cómoda, segura y sea cual sea el banco del usuario.
Para hacerlo, Bizum vincula un número de cuenta con un número de teléfono móvil de modo que, cuando se “hace un Bizum” a otra persona o se paga con Bizum en comercio electrónico, el dinero va desde la cuenta del que realiza el pago hasta la cuenta del que lo recibe. Y ese viaje tarda menos de cinco segundos, aunque se trate de cuentas de distintos bancos.
Dar respuesta a necesidades cotidianas
En sus escasos tres años de vida, Bizum ha albergado más de 87 millones de operaciones por valor de 4.100 millones de euros. De ese total, solo en 2019 se han producido 60 millones de operaciones, con un volumen asociado de 2.700 millones de euros.
Este espectacular crecimiento en el último ejercicio manifiesta la actual popularidad del servicio entre la población española.
Nigorra cree que este fenómeno responde a cuatro importantes características de Bizum: la sencillez, pues solo requiere utilizar el móvil y nunca se necesita saber la cuenta del destinatario; la comodidad, porque es fácil de usar, rápido y ágil, sin prepagos ni recargas; la seguridad, ya que el cliente se da de alta en su banco, aprovecha información que ya reside en los bancos, utiliza sus canales y está respaldado por los sistemas de seguridad de los grandes bancos; y la universalidad, ya que todo cliente con cuenta bancaria en España y número de teléfono móvil puede ser usuario, sin necesidad de cambiar de banco ni de abrir nueva cuenta.
“Bizum realmente soluciona necesidades cotidianas, porque facilita los pagos del día a día cuando las personas no disponen de efectivo, que es precisamente el objetivo con el que nació Bizum”, explica.
Cabe remarcar que Bizum no es una aplicación independiente, sino un servicio que los bancos incluyen dentro de sus propias aplicaciones, lo cual tiene varias consecuencias positivas.
Por un lado, todos los temas vinculados a la seguridad. No es posible hacer pagos con Bizum sin conocer las claves de acceso de tu banco, más el resto de medidas habituales que la entidad suele utilizar, como tarjetas de coordenadas, claves por sms, etc.
“Bizum fue diseñado para cumplir con la directiva europea PSD2 y, en particular, con sus requerimientos de autenticación reforzada, además de apoyarse en el resto de los exigentes de estándares seguridad que tiene la banca”, señala Nigorra. “Cada banco pasa todas las transacciones Bizum por sus sistemas antifraude y de seguridad conforme a la regulación vigente en cada momento”.
Otra ventaja que otorga a Bizum el estar integrado en las apps móviles de cada banco es su enorme potencial de crecimiento. “Un 96% de los clientes bancarios tienen Bizum en su banco, aunque quizá aún no lo han activado”, detalla el director general.
Hacia nuevas funcionalidades
En esa senda de crecimiento, una nueva funcionalidad lanzada a fines de 2019 fue la de pagos en e-commerce. Según cifras de la compañía, solo en el último trimestre del año, más de 2,5 millones de usuarios activaron su Clave Bizum para comprar online y ya en diciembre, los “bizumers” gastaron 1,5 millones de euros en sus compras navideñas en más de 250 comercios, con un importe medio de 62 euros por transacción.
“Nuestro objetivo para 2020 es contar con 5.000 comercios online que acepten esta solución de pago y llegar a facilitar un volumen de compras de 5 millones de euros”, indica Nigorra.
Al igual que entre particulares, la intención con la funcionalidad de pago en e-commerce es facilitar la vida de las personas al momento de realizar pagos, a través de un servicio que no tiene costes para el comprador y que tarda menos de 30 segundos en realizarse, solo requiere del número de móvil y con el respaldo de los protocolos de seguridad de las plataformas bancarias españolas.
“Por supuesto que nuestro objetivo es convertirnos en el medio de pago preferido de nuestros usuarios de forma general”, reconoce el ejecutivo. Y la única barrera que encuentran para lograrlo es el tiempo: “Los usuarios de Bizum necesitarán un cierto tiempo para conocer y habituarse a su uso en comercios, empezando por comercios en Internet, y que este se extienda progresivamente, al igual que ya han hecho con el pago entre particulares”.
Las posibilidades de crecimiento -en este terreno también- son inimaginables: el e-commerce superó en España los 10.900 millones de euros en el primer trimestre de 2019, lo que supone un 22,2% más que el año anterior, según los últimos datos de la .
Una opción más en la lucha contra el efectivo
Aunque podría pensarse en Bizum como un rival de las tarjetas de crédito o débito, Nigorra deja clara la diferencia entre ambas soluciones.
“Bizum es un servicio más del portfolio de soluciones de pago que ofrecen los bancos a sus clientes, para brindarles todas las alternativas posibles y que sean ellos quienes elijan cómo quieren realizar sus pagos”, comienza explicando.
“Aunque las marcas de tarjetas y Bizum podamos tener un objetivo común, como es el de ofrecer al usuario alternativas al uso del dinero en efectivo, realmente somos soluciones distintas. Bizum está orientado a facilitar a los clientes el pago inmediato de cuenta a cuenta a través del móvil, de forma rápida, cómoda y segura”, continúa.
Así, por ejemplo, Bizum no tiene tasas de intercambio como las tarjetas. Simplemente cobra a sus entidades las oportunas tarifas por sus servicios. Y, luego, un comercio puede acordar con cualquier banco que ofrezca el servicio las condiciones de aceptación de Bizum como medio de pago en un marco de libre competencia entre ellos.
Los próximos pasos
Al mirar hacia el futuro, la compañía es ambiciosa y prudente en partes iguales.
A los 5.000 comercios online que acepten el servicio, Bizum se suma el objetivo de alcanzar los 12 millones de usuarios en 2020, lo que supone duplicar el número de usuarios en tan solo un año. Asimismo, también prevé triplicar el número de transacciones este año: 180 millones frente a los 60 millones de 2019.
Si bien puede parecer demasiado, Nigorra asegura que es un plan realista. Y lo resume explicando la filosofía con la que trabaja Bizum: “Nuestro enfoque siempre es ir paso a paso y dar el siguiente una vez consolidado el anterior”.
Así, al preguntarle sobre la posibilidad de expandir Bizum hacia otros territorios, responde: “No descartamos extender el servicio fuera de España en un futuro. Un primer paso hacia fuera podría ser, por ejemplo, valorar la interoperabilidad con soluciones similares que pueda haber en otros países de Europa. Pero ahora nuestro foco está en el mercado español”.
Y allí, la próxima fase de la compañía pasa por ofrecer soluciones de pago a empresas y trabajadores autónomos, tales como cobros y pagos de empresas, pago de servicios a domicilio, etc. “En particular, nos podremos plantear también abordar el pago con Bizum en comercio presencial en determinados nichos donde aportemos un valor diferencial”, apunta el director general.
Otro gran terreno donde se acumulan los retos es la educación de hábitos en los usuarios, ya que el efectivo aún sigue muy presente en España. Para Nigorra, esta es otra gran oportunidad de continuar creciendo.
La idea de realizar pagos cotidianos prescindiendo del efectivo parecía una lejana utopía. Y Bizum ha demostrado en España que es una realidad, y que recién ha comenzado.