Después de revelar la propuesta Samsung Money (junto al banco SoFi) en Estados Unidos, la tecnológica surcoreana ha anunciado el lanzamiento de Samsung Pay Card en Europa. 

 

Samsung Pay Card ha sido diseñada junto a Curve, una startup de origen británico cuyo principal producto es una tarjeta que permite unificar todas las demás tarjetas que un cliente pueda tener con diferentes entidades bancarias. El principal beneficio de esta solución es que el usuario puede dejar todas sus tarjetas en casa, llevar únicamente la proporcionada por Curve y, desde la aplicación, escoger a cuál de ellas se deriva el cargo.

 

La idea tras Samsung Pay Card, en esencia, es la misma que existe actualmente tras las tarjetas creadas previamente por Curve. Los usuarios podrán vincular a la tarjeta de Samsung todas las tarjetas bancarias o de fidelización que tengan en su poder –incluso aquellas que no son compatibles con Samsung Pay–, comenzar a pagar con un smartphone compatible y, posteriormente, derivar los cargos a la tarjeta que consideren oportuna.

 

"La Samsung Pay Card powered by Curve nos permitirá expandir la oferta de Samsung Pay, ofreciendo a nuestros consumidores aún más beneficios y premios que nunca", ha expresado Conor Pierce, Vicepresidente Corporativo de Samsung en Reino Unido e Irlanda.

La nueva propuesta de Samsung dista de la solución Samsung Money que el fabricante surcoreano planea lanzar en Estados Unidos próximamente. El paquete Samsung Money está compuesto por una tarjeta de débito y una cuenta bancaria, mientras que la Samsung Pay Card es, simplemente, una tarjeta virtual que unifica todas las tarjetas de crédito o débito que el cliente pueda tener en otras entidades.

 

Por el momento, Samsung Pay Card se lanzará únicamente en Reino Unido. Con ella, cualquier persona podrá comenzar a utilizar Samsung Pay –incluso si las tarjetas de su banco no son compatibles con el servicio–. La compañía asegura que el servicio estará disponible a finales de este mismo año.