La mayor comodidad para realizar pago a  través de los móviles no ha logrado captar la confianza de los consumidores para cambiar o domiciliar sus pagos a través de este instrumento financiero, que es ampliamente utilizado en el mundo.
 

Durante la Conferencia Mundial de Comercio Móvil, celebrada en San Francisco, EEUU,  se llegó a la conclusión de que algunos servicios y ofertas especiales podrían atraer a los consumidores y a pequeñas empresas, molestos o decepcionados con los sistemas de pago actuales.
 

Por otra parte, algunos servicios financieros como las tarjetas prepagadas han resultado ser la forma más utilizada por los consumidores en muchos países asiáticos, africanos y latinoamericanos, servicio que por cierto está creciendo a pasos acelerados, según Bill Gajda, Director de productos móviles globales en Visa.
 

La diferencia en cuanto a la facilidad de uso entre tarjetahabientes de los Estados Unidos y los de Europa es insignificante, dijo el analista David Schropfer de la consultora grupo Luciano. “Pero los países más desarrollados y los del denominado Tercer Mundo o en vías de desarrollo, mantienen necesidades aparte en cuanto a la visión del comercio móvil”.
 

Esto podría conducir a los minoristas y pequeños comerciantes a la adopción de medidas o requisitos nuevos, por lo menos en los Estados Unidos. Estos requisitos podrían ser  la adopción de sistemas de chip y pines en los sitios donde se ofrezca el servicio de venta de tarjetas prepago para celulares.
 

A partir de 2015, las compañías de tarjetas de crédito planean desplazar responsabilidad por fraude a los minoristas, a menos que adopten sistemas de chip y PIN, que las empresas dicen que son más seguros. Los nuevos sistemas de punto de venta estarán todo equipados para NFC, también.
 

Fuente: CIO, América Latina