Un aumento del 25 por ciento en los pagos electrónicos se registró en América Latina durante 2013, lo que representó un crecimiento entre el 1,67 y el 2,89 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) regional, según dijo a este diario Jeff Wilson, presidente de Mastercard para Latinoamérica y el Caribe.
 

El cambio de mentalidad del consumidor ha hecho que las transacciones electrónicas ganen terreno, campo en que esta franquicia de tarjetas cuenta con 314 millones de plásticos en circulación y unos 5 millones de establecimientos comerciales habilitados para aceptarlas.
 

En Colombia, la mayor parte del mercado de pagos electrónicos se lo dividen Redebán y Credibanco, y tienen una menor participación Servibanca, ATH y la red cooperativa Visionamos.
 

En cuanto a las posibilidades de crecimiento de la franquicia de tarjetas, la adaptación en Colombia para reemplazar el efectivo es del orden del 50 por ciento. Todavía hay una gran tarea por hacer para que la sociedad disminuya el uso de efectivo y haga compras inteligentes con tarjetas.
 

"Es la tercera economía de América Latina y con gran inversión extranjera. Para este 2014 hemos reforzado nuestro trabajo en el país que tiene un grado de penetración del 12 por ciento del total del consumo familiar, vemos una oportunidad de traer productos para el consumidor, con expansión del débito y desplazando el efectivo", agregó Wilson.
 

Para ello, desarrollaron una aplicación en internet que explica el consumo inteligente y le brindan a los usuarios elementos de educación financiera, ofreciendo puntadas al uso racional del dinero en tarjetas, tanto débito como crédito.
 

Al preguntar por cómo está Colombia respecto de otras franquicias en Latinoamérica, Wilson se abstuvo de emitir algún comentario pero resaltó que son líderes en el país: "Vemos una oportunidad de expansión interesante en soluciones de pago domésticas, como es el mismo transporte público y manejo de las tarjetas con chip".
 

Para el directivo, Colombia es uno de los países más estratégicos de la región, como resultado de su expansión económica y donde Mastercard ha sido socio de los bancos locales para tener más penetración.
 

Más acceso a la sociedad
 

El aumento de la inclusión financiera, el fomento de los pagos electrónicos, así como el aumento de soluciones de pago domésticas, presentan un potencial en países como Colombia que tiene altas tasas de exclusión financiera.
 

"Además de llegarle a más personas de bajos estratos, la idea es enseñar que el consumo inteligente es una forma de activar la economía del país y el objetivo es cómo ayudar a nuestros jóvenes en Latinoamérica, impactando 15.000 jóvenes a través de los denominados Centros Poetas".
 

Aunque el directivo destacó que el mundo físico va a seguir existiendo es clara la convergencia hacia lo digital a través de internet.
 

Fuente: El Colombiano, Colombia