Usando moneda digital, el casillero inteligente podrá identificar cuándo el comprador ha recogido un paquete y, solo en ese momento, transferir el monto pagado por los bienes al vendedor.

El proyecto se enmarca en el ámbito de LIFT (Laboratorio de Innovaciones Tecnológicas Financieras), un programa del Banco Central de Brasil que tiene como objetivo crear casos de uso del real digital, dando cara a posibles usos de la nueva versión de la moneda. El trabajo en el laboratorio comenzó en septiembre de 2022 y se extenderá hasta febrero de 2023. Está previsto que un piloto real digital, junto con al menos uno de los nueve proyectos LIFT, se lance en la segunda mitad de 2023.
 
TecBan utiliza contratos inteligentes como un medio para garantizar que el consumidor solo pagará por el producto si realmente lo recibe. Los contratos inteligentes son programas informáticos autoejecutables que se ejecutan de acuerdo con reglas preestablecidas y se ejecutan en blockchains, redes inmutables que utilizan una tecnología similar a Bitcoin (BTC).
 
Además de garantizar la entrega de las mercancías contra pago, explica la empresa, la solución puede utilizarse para ampliar el área de entrega de los sitios de comercio electrónico, haciendo que los productos lleguen a más lugares del país.

 

“Cuando el producto se entrega físicamente en el casillero, todas las interacciones con él son desencadenantes de un contrato inteligente”, explica Luiz Fernando Lopes, gerente de plataformas digitales de TecBan.
 
“El casillero se puede colocar en puntos estratégicos, incluidos los cajeros automáticos (cajeros automáticos 24 horas) en las comunidades, para quienes estos productos llegan al final y promueven la inclusión social”, añadió el ejecutivo.
 
El proyecto propuesto por TecBan es el único de los nueve seleccionados por el Banco Central que utiliza el Internet de las Cosas (IoT). Se espera que el casillero inteligente integrado con contratos inteligentes obtenga un producto mínimo viable en febrero de 2023. A partir de entonces, se esperan otros 18 meses de prueba. Como no requiere legislación adicional, una versión final podría llegar al consumidor final en 2024.