La Comisión Federal de Comercio de Estados Unidos impedirá que Mastercard siga obligando a las tiendas que aceptan pagos con tarjetas de débito (online o a través de monederos digitales, por ejemplo) a dirigir todas estas operaciones a su red.

A la compañía también se le prohibirá intentar bloquear el uso de otras redes para pagos de débito , como dice la FTC que ahora está haciendo, siguiendo una práctica que viola la ley federal y es una "táctica comercial ilegal".
 
“Mastercard tendrá que comenzar a proporcionar a las redes de la competencia la información que necesitan sobre las cuentas de los clientes para que puedan procesar los pagos con débito”, expresaron desde la Comisión, según medios internacionales.
 
Cuando alguien paga con una tarjeta de débito, la información se transmite al sistema de pago de la tienda y al banco emisor de la tarjeta, que rechaza o valida la compra y la devuelve a la red de procesamiento de transacciones.

Mastercard y Visa tienen la mayor parte de este negocio por lo que cobran a los comerciantes altas tarifas de procesamiento aplicables a cada transacción. La legislación federal aprobada en 2010 en Estados Unidos para tratar de introducir más competencia en este mercado, determinó que los bancos deben permitir que el procesamiento de transacciones se realice por al menos dos redes por cada tarjeta emitida. La misma legislación también impide que las redes que procesan pagos con tarjetas de débito impidan que las tiendas utilicen otras redes.
 
Los datos de la FTC también destacan que el 80% de los estadounidenses utiliza al menos una tarjeta de débito y que anualmente en el país se realizan transacciones por 4.000 millones de dólares , pagadas por este medio. Los pagos con tarjeta de débito se han vuelto aún más populares con el auge de los sistemas de pago móviles digitales, que es donde radica la razón principal de esta sanción.