Este crecimiento radical refleja la etapa inicial del sector que actualmente se limita a proyectos piloto.

La adopción será impulsada por los gobiernos que aprovechan las CBDC para impulsar la inclusión financiera y aumentar el control sobre cómo se realizan los pagos digitales. Las CBDC mejorarán el acceso a los pagos digitales, particularmente en las economías emergentes donde la penetración móvil es significativamente mayor que la bancaria.

 

La investigación encontró que para 2030 el 92% del valor total negociado a través de CBDC se pagará a nivel nacional. Esto refleja un cambio de casi el 100 % durante las etapas piloto actuales, a partir de 2023. Dado que las CBDC son emitidas por los bancos centrales, inicialmente estarán estrechamente dirigidas a los desafíos de pagos nacionales y, por ende, los pagos transfronterizos vendrán más tarde a medida que se establezcan los sistemas y se vinculen entre las CBDC utilizadas por países individuales.

El autor del informe, Nick Maynard, explicó: "Si bien los pagos transfronterizos actualmente tienen altos costos y velocidades de transacción lentas, esta área no es el foco del desarrollo de CBDC. Como la adopción de CBDC será muy específica de cada país, las redes de pagos transfronterizos se involucrarán para vincular esquemas entre sí permitiendo que la industria de pagos en general se beneficie de las CBDC".

 

La investigación también identificó falta de desarrollo de productos comerciales en torno a las CBDC como un factor limitante clave para el mercado actual con pocas plataformas bien definidas para que los bancos centrales las aprovechen. La investigación también recomienda que los posibles proveedores de plataformas de CBDC desarrollen una solución completa end to end, que incluya capacidades mayoristas, provisión de billeteras y aceptación comercial con el objetivo de viabilizar el potencial de las CBDC.