El proyecto tiene como objetivo explorar y desarrollar casos de uso para una moneda digital nativa de Brasil.
 

En esta segunda fase, el Banco Central supervisará 11 proyectos, mientras que la Comisión de Valores de Brasil (CVM) supervisará dos. Visa trabajará junto con la corredora brasileña XP y el banco digital Nubank para optimizar el mercado de divisas. Santander, por su parte, se centrará en proyectos relacionados con operaciones automotrices y préstamos, así como en iniciativas de descarbonización.
 

Además de Visa y Santander, otras importantes entidades financieras locales como Bradesco, Itaú Unibanco y la bolsa de valores B3 también participarán en esta fase del piloto. La infraestructura creada para el piloto permitirá probar la implementación de servicios financieros a través de contratos inteligentes gestionados por terceros.

El Banco Central de Brasil abrirá una nueva convocatoria en el tercer trimestre de 2024 para empresas interesadas en participar en el piloto DREX, con el objetivo de probar la implementación de contratos inteligentes para finales de la primera mitad de 2025.
 

Este proyecto representa un paso significativo hacia la modernización del sistema financiero brasileño y la exploración de nuevas tecnologías para mejorar la eficiencia y seguridad de las transacciones financieras.