En el panel “Escenario de pagos en iGaming: desafíos y oportunidades en la era del Pix y la regulación”, se destacó cómo la evolución del Open Finance abre la puerta a tecnologías más eficientes y seguras.
 

Cesar Garcia, CEO de OneKey Payments, afirmó que el uso de la biometría podría revolucionar la experiencia del usuario al eliminar fricciones típicas del proceso de pago actual con Pix. “Hoy, un usuario debe copiar un código, cambiar de aplicación y completar el pago en su banco, lo que puede tardar de dos a tres minutos. La biometría reduce este proceso a segundos”, explicó. Según él, esta tecnología tiene el potencial de convertirse en el principal medio de pago en Brasil, no solo para iGaming, sino para todo el ecosistema de comercio digital.
 

 

 

Bruno Gonçalves, Sales Manager de OktoBank, reforzó esta visión, destacando que la biometría no solo agiliza el proceso, sino que también reduce las fallas provocadas por inestabilidades en las plataformas bancarias. “Un ‘Pix biométrico’ está llegando para quedarse. Es innovación pura, y el consumidor brasileño no podrá resistirse a algo tan eficiente”, señaló.

 

En este contexto, el pago biométrico se perfila como una evolución natural de Pix, alineada con un entorno regulatorio que impulsa la innovación y busca ofrecer experiencias más seguras, ágiles y convenientes al usuario final.