Los colombianos prefieren endeudarse para comprar vivienda antes que para créditos de consumo, así lo muestra un informe del Banco de la República que, en promedio, la deuda en tarjeta de crédito es de COP 2,9 millones, mientras que la hipotecaria ya llega a COP 42,9 millones.
 

En este sentido hay que destacar que en la modalidad de consumo, el crecimiento de las deudas de los tarjetahabientes en el último año ha sido de 3,57%, aumentando tan solo COP 100.000 respecto a diciembre de 2012.
 

“Lo cierto es que la manera en la que el Banco de la República viene controlando el crédito es muy positiva, algo que se puede ver con el hecho de que el crecimiento de la cartera vencida haya caído. Esto muestra que la calidad es mejor y, por lo tanto, el endeudamiento de los colombianos está controlado”, señala Luis Carlos Guzmán, director de economía de la Universidad Central.
 

Y es que el Emisor deja claro que la desaceleración de esta cartera durante el último año muestra cómo la calidad de los créditos ha mejorado.
 

En el otro lado, está la modalidad de vivienda, en la que el promedio de deuda de los colombianos es de COP 42,9 millones. Aunque no todos los tipos tienen el mismo monto. Al observar los créditos para viviendas de interés social, se ve como el promedio se ubica en COP 23,1 millones, mientras que en la modalidad normal, sería de COP 76,2 millones.
 

“La cifra está en un rango sostenible. El PIB per cápita está sobre US$10.000, por lo que una familia con dos ingresos, podría hacerse cargo de ese promedio en un año. Pero lo que está claro es que los datos muestran una mayor tendencia hacia el endeudamiento, por lo que hay que estar pendientes, ya que ante mayores tasas o menor crecimiento, podría haber problemas”, afirma César Corredor, director de economía de la Universidad La Salle.
 

Precisamente, este monto de deudas viene registrando un aumento importante. El crecimiento real anual se ubica en 10,4%, lo que muestra una aceleración frente a mediados de 2013 cuando ese avance era de 8,6%.
 

“Es normal que hoy en día haya crecimiento en el endeudamiento, las menores tasas y la mejora de las condiciones salariales de los colombianos hacen que este tipo de financiación sea de las más atractivas del mercado”, agrega Corredor.
 

Es por esto que antes de tomar un crédito, que se caracteriza por ser de montos altos y a largo plazo, se debe estar seguro de tener la capacidad. “Endeudarse para comprar una vivienda es buena opción, ya que se obtienen recursos baratos, pero las personas deben estar seguros de que van a poder hacerse cargo de la deuda para enfrentar problemas que se pudieran presentar más adelante”, considera Henry Bradford, vicerrector del Cesa.
 

No hay que olvidar que los bancos del país, por lo general, no le prestarán más de 70% del valor del inmueble en su crédito.
 

En las otras líneas de consumo, los créditos de vehículos registran una deuda en promedio de $20,7 millones, al tiempo que los otros productos llegarían a $14,3 millones.
 

Otra de las modalidades cuya deuda en promedio llama la atención es la del microcrédito. Según el informe del Emisor, hoy en día la deuda promedio por este tipo de crédito es de $3,7 millones.
 

“Los microcréditos son créditos de montos bajos, por lo que el nivel de deuda en promedio que se tiene, se podría considerar bastante preocupante y más al tener en cuenta que cada vez más, las personas que tienen deudas con microfinancieras, también se endeudan con otras formas de consumo”, considera Bradford.
 

Los expertos no ven por el momento necesidad de prender alarmas, pero la tendencia al alza del endeudamiento es un aspecto para monitorear.
 

Fuente: El País, Colombia